La violencia sexual digital y la inteligencia artificial: regulación de los deepfakes y protección de la autodeterminación sexual en el ciberespacio

Resumen

Con el desarrollo de la tecnología, surgen nuevos peligros en la comunidad de los riesgos, específicamente frente al bien jurídico de la libertad, integridad y formación sexual. El gran avance de la inteligencia artificial y de los métodos de la información y las comunicaciones ha generado nuevos supuestos fácticos que constituyen un desafío para la ciencia normativa del derecho penal, ya que esta debe actualizarse constantemente para ofrecer una protección y prevención efectivas a la sociedad. En concreto, nos referimos a los casos de sextorsión, que implican chantajear a la pareja para obtener favores sexuales o mantener la relación, a la difusión de imágenes sexuales no consentidas como una forma de represalia por la terminación de una relación, y a la creación de imágenes sexuales de adultos, adolescentes y niños mediante programas que utilizan inteligencia artificial, ya sea a partir de imágenes totalmente sintéticas o de fotos reales de rostros. El Código Penal colombiano no contempla en su parte especial tipos penales que permitan castigar y prevenir este tipo de conductas, las cuales ponen en grave riesgo la salud mental, la integridad sexual y moral de las víctimas. El objetivo del presente artículo fue analizar el marco jurídico vigente en Colombia frente a estos comportamientos y evaluar cómo los vacíos en el Código Penal afectan la prevención y sanción de las conductas que vulneran los derechos fundamentales relacionados con la libertad, integridad y formación sexual. Se determinó que, muy a menudo se recurre a otros tipos penales que no abarcan la integralidad ni el contexto de la situación, perpetuando así la impunidad y la desprotección social. Es necesario analizar el fenómeno desde la doctrina y la legislación comparada para ofrecer reformas que permitan actualizar nuestro Código Penal colombiano a partir del avance de la inteligencia artificial y prevenir la violencia sexual digital.